domingo, 19 de julio de 2009

Un domingo más...

El día domingo suele ser tranquilo y muy distinto del resto de días. La ciudad "se calma" y uno puede observar detenidamente casas, edificios, calles, personas y otra infinidad de cosas que complementan a una ciudad, sin estar pendiente del tiempo. El domingo es familiar, día de partido, para "echar la hueva", salir a "pasiar", comer pollo campero en la casa, visitar a la abuelita, tía, prima u otros conocidos y no olvidemos la misa.

En mi caso fue distinto, tomé mi bolsa y me dirigí con un buen amigo a ver "Las Profanas" en el Teatro Bellas Artes. Durante la espera para ingresar, paseamos por el área y es algo fenomenal "explorar" unas cuantas cuadras el área lejana de donde uno habita. Todo se siente distinto, un tanto desubicado y con aire aventurero se embarca a "ver que hay". Lastimosamente este encanto terminó un par de cuadras más adelante del teatro cuando observé una hombre misterioso siguiendo nuestro mismo camino. Como parte de mi psicosis -no sé cómo llamarle- guatemalteca retomamos un breve regreso cerca del área donde se desarrollaría la presentación.
Durante la espera observé al señor de los helados de carrito pasando y sonando su campanita para llamar la atención, disfruté de un, quizás no buen helado, pero de un típico helado de guatemala e ingresamos.

Es realmente extraordinario y a la vez original la manera en que se desarrolló la obra. Expreso mi total satisfacción, pero a la vez es no sólo risa lo que me causaba lo que mostraba cada actriz en su personalidad: la típica "rebelde, neomarxista trasnochada, con su playera de: No al plan puebla Panamá", la devota a la religión y así sucesivamente. Caras de nuestra Guatemala, que vemos día a día. Es bonito asistir a eventos de esta índole y realmente... mmm desarrollaré más adelante este tema. Por ahora expreso que fue un domingo único y con ansias de que se repita más seguido. Ahora lo que sigue es la feria del Libro...
© Página Llena. Design by FCD.